El carnaval de Málaga tiene una especial relevancia
en el carnaval andaluz otro importante foco que atrae a los más fieles seguidores de
estas fiestas y que se encuentra en España: Málaga, ciudad que pertenece a la comunidad
autónoma de Andalucía y cuyos festejos carnavalescos son comparables a los del carnaval de Cádiz, ya que ambos
son dos de los más destacados en la Península Ibérica.
Al igual que otras ciudades de este país y también las de otros lugares anteriormente
citados, esta costumbre lleva celebrándose desde hace muchos siglos y ha llegado hasta
nuestros días.
Durante los siglos XVIII y XIX, en pleno auge de la sociedad de clases propia de la
época, la clase obrera tuvo un papel importante en esta celebración, aunque no hay
ninguna duda de que la burguesía local también participaba en ella mezclándose con la
gente de las clases sociales más bajas.
El mundo en estos momentos se encontraba en la etapa de la industrialización y las
ventajas y desventajas que ello conllevaba dependiendo de la clase o grupo social a la que
se perteneciera.
La población salía a las calles buscando diversión cuando llegaban los carnavales y
los habitantes cambiaban su atuendo habitual por otro más colorido acorde con la
tradición carnavalesca, que en tantos lugares se realizaba y servía como un gran y
esperado entretenimiento, pese a que no faltaba la constante vigilancia de las autoridades
y los altos mandos de la zona, los cuales trataban de evitar el desenfreno y el descontrol
para evitar acciones que rompieran los límites de las leyes.
Quienes tenían más poder económico o más dinero podían permitirse pagar por entrar
en el baile de máscaras que se hacía en esta época en el Teatro
Principal. Estas personas eran, normalmente, pertenecientes a la burguesía, por lo que
este grupo social también tuvo una especial importancia en la celebración del carnaval de Málaga en aquellos
momentos de crecimiento para ellos y esto ha dejado un importante legado cultural que
puede ser conocido en la actualidad por los visitantes que acuden a la ciudad y enriquecen
sus conocimientos estudiando la historia de esta.
Muchas veces los acontecimientos históricos de estos siglos hicieron que se produjeran
celebraciones relacionadas con el carnaval que conservaban las mismas características de
este, como ocurrió cuando el rey Carlos IV se coronó como monarca español o cuando
Isabel II, futura reina de España, fue proclamada como Princesa de Asturias.
Fue en estos siglos en los que la burguesía buscaba diversión y las clases populares
modos de expresión de sus ideas, cuando el carnaval en Málaga tuvo un importante auge
marcado por esas diferencias entre ambos grupos que compartían alegría, pero a la vez
rivalidad en algunas ocasiones, y gracias a esto se puede conocer y celebrar en nuestros
días con esa especial seña de identidad que lo hace diferente del de otras ciudades,
pues es bien sabido que cada una mantiene su tradición individual propia de ese mismo
lugar, aunque mezclado con las costumbres habituales de la celebración. |